Descubre los diferentes tipos de vino tinto el es una bebida alcohólica elaborada a partir de las uvas, se bebe en prácticamente todas las partes del mundo. Y es que el vino tinto ya se hacía desde hace más de 8000 años atrás. Esto quiere decir que es parte fundamental de nuestra cultura y testigo presencial de la evolución de las sociedades.
Él mismo ha evolucionado y, en la actualidad, tenemos la oportunidad de disfrutar de una muy interesante diversidad de vinos.
¿Cuántos existen?
Expresar un número específico de tipos de vinos tintos que existen resulta difícil, pues existe una gran cantidad de variables mediante los cuales se diferencian. Algunos de los aspectos que se toman en cuenta para la clasificación son: color, sabor, cepa, concentración de azúcar, aroma y más.
Algunas de las tipologías más representativas son las siguientes:
Merlot
Para degustar junto con alimentos como los quesos, el cordero, el pollo; este tipo de vino a la perfección. El merlot es un vino tinto suave y de gran aroma. El color del merlot es muy característico, color rubí con tonalidades violetas; además, su color se intensifica según el tiempo de añejamiento.
Los olores que se pueden encontrar en esta variedad de vinos son bastante variados, algunos especialistas de la cata enumeran los siguientes:
- Humo
- Moras
- Cuero
- Pimientos dulces
- Grosellas
- Ciruelas
- Arándanos
Este tipo de vino tinto se puede consumir siendo joven y se puede descubrir en él algunos de los siguientes sabores: uva, miel y menta. Si bien es cierto que es un vino que puede ser bebido son maduración, también se le puede añadir mayor cuerpo y profundidad a través del añejamiento.
Malbec
Para acompañar carnes rojas, nada como un buen vino tinto tipo Malbec. El color de este vino es de un tono violeta muy intenso, que puede ser brillante o más bien opaco, dependiendo de la zona de cultivo de la uva.
Los aromas que se pueden percibir en este vino son sobre todo afrutados mientras es un vino joven. Si cumple un proceso de añejamiento, va adquiriendo otros olores como vainilla y canela. En boca, los sabores que se perciben en este vino son los siguientes:
- Ciruela
- Chocolate
- Frutos secos
Con la maduración, este vino adquiere sabores a cuero, vainilla, pimienta, tabaco y canela; depende también del tipo de envase que se use.
Cabernet Sauvignon
Para disfrutar de guisos, patés y otras carnes, el Cabernet Sauvignon va muy bien. Este vino tinto tiene un color rubí con tonos violáceos intensos. Mientras que en al olfato, el carbernet sauvignon se caracteriza por diversidad de aromas:
- Grosellas
- Cerezas
- Ciruelas
Cuando es madurado en barrica, este vino adquiere otros aromas como: tabaco y chocolate. En boca, este vino tiene sabores bastante intensos de pino, cedro, chocolate negro y aceitunas negras. El sabor de este vino es mucho mejor luego de un proceso de maduración, pues jóvenes pueden parecer ásperos.
Carmenere
Para comer con cerdo o pasta, este es un vino que puede ir excelente. Tiene un color rojo en tono brillante y un poco violeta. El sabor de esta variedad es muy característico, recuerda a frutas maduradas y a madera. Es un poco similar al cabernet sauvignon, pero el Carmenere tiene un sabor más delicado, suave y aromático.
Una de las características de este tipo de vino es que se hace a partir de una cosecha tardía además se lleva a cabo un proceso de maduración en roble. Todo esto se conjuga para que afloren todos sus aromas y sabores. Entre los sabores que destacan de este vino son: pimienta, humo, nuez moscada, canela y café.
A pesar de que tuvo su origen en Francia, actualmente es más cosechado y producido en Chile.
Syrah
Para comer pavo o carnes rojas, por ejemplo, esta variedad resulta una excelente opción. El color de este vino es rojo intenso bastante brillante, gracias a las condiciones en las que es cosechado, con mucho sol y calor. Los aromes que destacan en este vino tinto son diversos:
- Frutas rojas
- Canela
- Clavo
- Pimiento
- Frambuesa
- Grosellas
- Violetas
- Moras
Luego de la maduración, adquiere nuevos aromas: ahumado, cuero y vainilla. Su sabor es un poco astrigente donde predominan las grosellas y las ciruelas. Este vino se puede beber joven o someterlo a un proceso de maduración.
Pinot Noir
Para degustar con pollo, pescado y pato, es una excelente opción el Pinot Noir. El color de este vino es rojo de poca intensidad. El aroma de este vino es a aromas frutales, frambuesas, grosellas, cereza y florales.
El sabor de este vino es bastante delicado, poco ácido. Los sabores que se pueden percibir en este vino es de frutillas, arándanos, canela, rosa y anís; así mismo, otros sabores se pueden percibir según el lugar de la cosecha.
La cepa de esta uva es muy versátil, pues se puede transformar en un buen vino tinto; pero también en blanco o un excelente vino rosado.
Zinfandel
Para disfrutar de una carne bien condimentada, el acompañamiento con el vino tinto zinfandel es excelente. Los sabores que se pueden percibir en este vino son especialmente cerezas, moras y fresas. Los aromas de este vino se confunden entre el tabaco y la manzana. Además, es un vino con un alto contenido de alcohol; por lo tanto, se considera pesado.
Si bien es cierto que esta variedad nació en Italia, actualmente es el vino característico de los Estados Unidos.
Tempranillo
Para acompañar un asado de cordero, este vino tinto es realmente excelente. Su color es rubí y el aroma de este vino es liviano con tonos a fresa, ciruela, chocolate, tabaco, vainilla y otros. El sabor de este vino es liviano, delicado; con poca acidez y finura. En la actualidad, se considera como unos de los vinos tintos más importantes de España.
Garnacha
Para acompañar una degustación de frutos secos, el acompañamiento con este vino resulta muy buen complemento. Este es un vino tinto con un color rojo poco intenso, por lo que su cepa puede ser utilizada también para la elaboración de vinos rosados.
Los aromas que se distinguen este vino con moras, ciruelas e hierbas mediterráneas, como el romero y el tomillo; lo que lo hace un vino muy característico de la zona. Los sabores que se pueden percibir en el garnacha son intensamente frutales.
Este vino tiene alto contenido de alcohol y con cierta acidez. Esta es una de las cepas más cosechadas en España; por lo tanto, uno de los vinos más producidos en este territorio.